
Michael Mendoza: “Estoy guerreando por mis tres hijos”

Michael también dejó claro que gracias a Dios mucha gente bondadosa en la transitada avenida maracaibera siempre le obsequian compras, ropa y a veces ayuda monetaria.
Michael Steven Mendoza es un maracaibero de 34 años quien día a día sale a ganarse el pan diario para su esposa y tres hijos. A este luchador zuliano la vida le cambio de manera drástica hace 6 años cuando en búsqueda de un mejor porvenir para el y los suyos decidió emigrar para el vecino país Colombia.
Todo marchaba de manera aceptable para Michael, cuando inesperadamente sufrió un accidente laboral, donde perdería sus dos piernas, lo que le impediría seguir laborando; luego de su milagrosa recuperación Mendoza permaneció en tierras neogranadinas, a la espera de una supuesta indemnización que nunca llegó.
Al ver que su indemnización no llegaba, tomó la decisión de regresar a su natal Venezuela, donde llegó a finales del 2023 sin un trabajo y sin sus dos miembros inferiores, pero con unas ganas inmensas de salir adelante por su familia quienes son el envión que lo motiva día a día.
Desde enero del año 2024, Michael se apersona en la avenida Dr Portillo con Delicias de la ruidosa Maracaibo, donde a partir de las 8 de la mañana hasta aproximadamente las 4 dela tarde, se dedica a vender caramelos para llevar el sustento diario para su casa.
A lo largo de la extenuante jornada y el inclemente sol maracaibero, este zuliano muestra su mejor ánimo, tratando de sonreírle a quienes les compran su producto durante el tiempo que el semáforo de la famosa avenida zuliana, se mantiene en rojo.
Mendoza recalcó que esta guerreando por sus tres hijos a quienes quieren darle lo mejor junto a su esposa, también expresó que hasta ahora no ha recibido ninguna ayuda de ningún ente municipal, regional ni nacional.
A quienes solo les pide que lo ayuden, con unas prótesis si esta a su alcance, si no que le faciliten una ayuda económica para montar un tienda en su casa ya que con ella no tendría que laborar donde lo hace ni en las condiciones en que lo hace.
Michael también dejó claro que gracias a Dios, mucha gente bondadosa en la transitada avenida, siempre le obsequian compras, ropa y a veces ayuda monetaria.
Mendoza también dejó saber que, se siente mal porque ninguno de sus tres hijos están estudiando ya que lo que allí genera no le alcanza para inscribirlos ni para comprarles los útiles escolares, y por consiguiente agradecería cualquier ayuda que puedan donarle paras sus infantes.
Para finalizar Michael le envió un mensaje a todos los jóvenes que estudien y que le hagan casos a sus padres, ya que el estudio siempre les hará falta.
Texto y Fotos: Luis Molero
Luis Molero Marquez