No lo intentes más: hazlo

Cuando quisiste aprender a manejar. Lo pensaste y luego, te dedicaste a aprender. Tomaste prácticas. Lo hiciste. Un ingeniero o arquitecto al momento de construir algo, edificio, casa, carretera; lo plasma en su mente, lo imagina, luego lo expresa en un plano. Pero tal construcción no existirá si no se aboca a la tarea de efectivamente construirlo, hacerlo.

Ahora te pregunto ¿Crees que el INTENTARLO realmente funciona?¿Crees que todo cuanto ves a tu alrededor es producto de que alguien lo intentó o es el resultado de que alguien lo realizó? Intenta comerte un helado ¿Te funciona? Creo que no. O lo comes o no lo comes ¿Todo cuanto has logrado en tu vida, lo has intentado o lo has hecho? La verdad es que todo cuanto existe ha sido hecho. Intentar ¡NO EXISTE! Intentar no funciona. Intentar no crea, no construye.

Resulta, que en nuestra vida, nos la pasamos intentando. Voy a intentar rebajar de peso. Voy a intentar hacer ejercicios. Voy a intentar montar un negocio. Voy a intentar conseguir un mejor empleo. Voy a intentar ser mejor persona, y así sucesivamente. Haz tu propia lista de intentos. Se han quedado allí, en puros intentos. Existen solo en tú mente. Pero no lo has hecho. Por ello no lo has logrado. Resulta, que nuestra lista de intentos es larga. La lista de logros muy corta. Muchas cosas no has logrado porque lo has intentado, más no lo has hecho.

El día que te enfoques en hacer y no en intentar, comenzarás a notar tus logros. Por tanto, borra de tu vocabulario o diccionario la palabra intentar. Es una trampa, una ilusión, de que estás haciendo, cuando en realidad no estás haciendo nada.

Cuando decimos lo voy a intentar, opera el mecanismo del auto engaño, pero sobre todo el miedo a equivocarnos. Toma consciencia que cuando dices “lo voy a intentar” estás de algún justificando y anticipando que no lo harás. Te dirás luego, bueno pero lo intenté. Tomas Edison dice que realizó más de mil pruebas hasta lograr el famoso bombillo que hoy conocemos. Pero no las intentó. Las realizó. Y en cada prueba descubrió que no era la forma de hacerlo. No lo vio como equivocación. Y realizó cada una de las pruebas, hasta que lo logró. Y es que no hay forma de lograr algo, sin hacerlo. Intentar no funciona.

Intentar no genera logros, porque no hay compromiso con aquello que se quiere lograr. Hay el conformismo del decir “ al menos lo intenté”. Intentar no te da motivación, no genera constancia, perseverancia, porque el Intentar, en realidad, no está orientado al logro. Vuelvo a repetirlo: Intentar no te llevará a lograrlo. Te engañaras a ti mismo, creando la ilusión que los has hecho. Y te dirás: lo he intentado. Y te conformarás. Por el contrario, hacerlo te conducirá a lograrlo. Y de no lograrlo te acercará a ello, o aprenderás que ése no es el camino, o te dirás “no todavía”. Quién “intenta algo” no es constante. Quien “lo hace”, persevera hasta lograrlo.

Conclusión: Borra LO VOY A INTENTAR de tu mente y lenguaje. No lo intentes, simplemente hazlo. Convéncete, que nada lograrás si vives en “modo lo voy a intentar”. Cosecharás tus logros cuando actives el “modo lo haré”. Es lo que yo llamo INICIATIVA en mi libro “LA VIDA EN TUS MANOS”. Sin iniciativa, no hay logros. Así que deja de INTENTAR y toma la INICIATIVA.

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