Retiraron las esposas a Jacob Blake, que sigue herido en el hospital

Las autoridades locales en Kenosha (Wisconsin, EE UU) dejaron el viernes en libertad al afroamericano Jacob Blake, quien estaba esposado a la cama del hospital tras recibir el domingo pasado siete disparos por la espalda, según confirmó su abogado.

La noticia de que estaba esposado, difundida el jueves por sus familiares, provocó una gran indignación en el país, donde nuevas protestas estallaron tras el tiroteo de Blake.

El propio gobernador de Wisconsin, el demócrata Tony Evers, dijo no entender “la necesidad” de tenerlo esposado.

La Policía de Kenosha aclaró este viernes que sobre Blake pesaba una orden de detención por agresión sexual, ingreso ilegal a una propiedad y comportamiento violento, motivo por el que estaba esposado a la cama del hospital.

Sin embargo, también este viernes fue dejado en libertad, por lo que se le retiraron las esposas y ya no está bajo la custodia de la Policía.

Blake está acusado de haber agredido a su expareja, con la que tiene tres hijos.

Blake se recupera en un hospital de las heridas de bala que probablemente no le permitirán volver a caminar.

Este nuevo incidente entre un policía blanco y un afroamericano ocurrió el domingo cuando las autoridades despacharon agentes ante una trifulca familiar.

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